Las personas que han logrado escapar hablan de pueblos reducidos a cenizas, ejecuciones, secuestros y ataques indiscriminados.
Una nueva ola de enfrentamientos entre dos grupos armados ha obligado a 30.000 personas a abandonar sus hogares en los alrededores de la ciudad de Paoua, en el noroeste de República Centroafricana (RCA), según informó la asociación Médicos sin Fronteras.
Se trata del bando Revolución y Justicia (RJ) enfrentado al Movimiento para la Liberación de la República Centroafricana (MNLC) que constantemente libran violentos ataques en una zona cercana a la frontera con el Chad.
Tal y como se lee en la página web de la organización de acción médico-humanitaria, los desplazados que han logrado escapar hablan de pueblos reducidos a cenizas, ejecuciones, secuestros y ataques indiscriminados; motivo por el cual se han visto obligados a suspender sus actividades en los siete puestos de salud en los que prestaban apoyo a la población, de los cuales tres ya han sido saqueados.
De momento, la situación sigue siendo extremadamente tensa.
(vaticannews.va)