Mons. Salvador Giménez El lunes, 11 de abril, nos reuniremos en Vic los obispos y los presbíteros de las diócesis con sede en Cataluña con motivo del centenario de la muerte del venerable Josep Torras i Bages, obispo que fue de aquella diócesis desde 1899 hasta el año 1916. En otras ocasiones se han dado encuentros como el presente. Se trata de compartir la alegría de nuestra actividad sacerdotal, reflexionar sobre algún aspecto de nuestra misión y recordar la figura de un pastor que haya sido ejemplo de vida y de ministerio. Me parece oportuno dar esta información para invitar a que todas las comunidades cristianas oren por sus sacerdotes, se alegren por ellos acompañándoles y agradeciendo su servicio y colaboren en todas la iniciativas pastorales que impulsen.
Los tres elementos tienen una justificación. Celebrar un encuentro con muchos sacerdotes en tiempos de Pascua produce la misma sensación festiva y alborozada que la de una familia que aprovecha un encuentro con los suyos para conversar, animarse en las propias tareas, agradecer los servicios, estrechar los lazos del cariño y proponer ayudas en futuras dificultades. Esto es compartir. Tendremos un tiempo para la reflexión que dirigirá el prefecto de la Congregación del Clero, el Cardenal Beniamino Stella, sobre la vida y el ministerio del presbítero. Será el momento de la reflexión que culminará con la celebración de la Eucaristía y la posterior comida fraternal. Y el tercer elemento se centrará en conocer un poco mejor la figura del obispo Torras i Bages y pedir que se agilice su causa de beatificación, ya iniciada en el obispado de Vic.
Seguro que os agradará conocer en estas breves líneas algunos rasgos biográficos de este venerable obispo: “El doctor Josep Torras i Bages va néixer a les Cabanyes (Alt Penedès) el 12 de setembre de 1846. Estudià a Barcelona on es doctorà en dret civil i canònic. Va ser ordenat sacerdot l’any 1871. Fou consiliari del Cercle Artístic de Sant Lluc. Fundà la Lliga Espiritual de la Mare de Déu de Montserrat. Escriví nombrosos articles i obres ; cal destacar-ne La tradició catalana. En 1899 va ser nomenat bisbe de Vic. Al llarg dels disset anys d’episcopat fou sempre exemplar. Esmerçava sis hores diàries en les diverses formes de pregària. Féu tres visites pastorals a la diòcesi. Escriví 52 cartes pastorals. La seva labor com a pastor transcendí els límits de Vic i arribà a tot el Principat, de manera que fou anomenat Patriarca espiritual de Catalunya. Morí santament el 7 de febrer de 1916. Sant Pius X el lloà com a ‘bisbe típic tal com el descriu l’Apòstol”.
Os invito a conocer más sobre este obispo, sus escritos, las mil anécdotas de su vida austera y honesta, los numerosos servicios prestados a la Iglesia para que os sirva de modelo de actuación. Os recuerdo que determinados personajes del pasado nos ayudan, con su ejemplar manera de entender y vivir el seguimiento de Cristo, a fortalecer la fe y la vida cristiana actual. Abundan los casos que su persona y su actividad nos enorgullece y nos identifica. Nos sentimos dichosos de pertenecer a la misma comunidad aunque vivamos en épocas distintas. Permanece siempre el espíritu de generosidad y servicio que nos pedía el Señor en el evangelio y que nos beneficia a todos. Teniendo esto presente termino con un ruego: que aumentéis vuestras oraciones por los sacerdotes, que les ayudéis en los distintos momentos de sus vidas, que colaboréis en las múltiples iniciativas que llevan a cabo en las comunidades. Necesitamos pastores íntegros, entregados, atentos a las necesidades materiales y espirituales de los demás; pastores que, en imagen repetidamente utilizada por el papa Francisco, caminen a la cabeza del rebaño para orientar, en el centro para intercambiar y conocer sentimientos y dificultades y al final, para recoger y animar a los rezagados y cansados. En definitiva, para acompañar a todos como lo hacía el obispo Torras i Bages.
+Salvador Giménez
Obispo de Lleida