El martes, 2 de febrero, a las 18:30, se celebró una Eucaristía en la Santa Iglesia Catedral presidida por Mons. Carlos Manuel Escribano Subías, para clausurar el Año de la Vida Consagrada. Este año fue propuesto por el Papa Francisco cuando se cumplen los cincuenta años del documento conciliar Perfectae Caritatis sobre la renovación de la Vida Consagrada.
En palabras de nuestro Obispo: «clausuraremos el Año de la Vida Consagrada que este curso ha iluminado el trabajo de nuestros religiosos y religiosas; con ellos pedimos el don de la renovación de la vida religiosa para que sigan siendo signo del amor de Dios entre nosotros.»
(Diócesis de Teruel y de Albarracín)