Mons. Camilo Lorenzo Un saludo para todos en este mes de octubre. Cada año por estas fechas la Iglesia, a través de las Obras Misionales Pontificias y las Delegaciones diocesanas de misiones, nos invita a intensificar nuestra conciencia misionera. Nos recuerda cuatro caminos que nos facilitaran la tarea misionera: la oración, la entrega-sacrificio, la cooperación y la generosidad de vocaciones a la misión universal.
Cuando leemos el lema de este año: “Fe + caridad = misión” se nos invita a hacer realidad en nuestras vidas la experiencia cotidiana de Jesús, su confianza absoluta en el Padre, su experiencia de hijo de Dios se traducía en la cercanía, la compasión, el servicio a las personas de su tiempo, especialmente a los pobres y a los más desfavorecidos.
La fe abre, da a todos nuestros gestos de servicio la dimensión de plenitud, eternidad y servicio a los hermanos y también da a nuestra fe la dimensión de encarnación y de trasformación de un mundo llamado a vivir la fraternidad para transformarse en familia de Dios.
Les invito a todos en estas fechas a dar gracias a Dios por el don de la fe y a dar testimonio de palabra, con nuestras obras y nuestra vida de este don que nos hace hijos de Dios y servidores de los hermanos. La prueba más clara de una fe adulta individual y colectiva la tenemos cuando compartimos este don con las personas de cerca y de lejos, haciendo de nuestras comunidades cristianas comunidades misioneras.
Saludo y agradezco también en esta Jornada del DOMUND a todos los misioneros diocesanos que son un testimonio de fe y de servicio para nuestra Iglesia diocesana.
+ Camilo Lorenzo Iglesias
Obispo de Astorga