Del 27 de abril al 1 de mayo, se desarrolla la peregrinación diocesana de la Iglesia en Asturias con enfermos a Lourdes, que está presidia por el Arzobispo de la diócesis monseñor Jesús Sanz. La peregrinación está formada por doscientas personas, entre enfermos, voluntarios de la Hospitalidad Nuestra Señora de Lourdes, asistentes sanitarios y sacerdotes, que conviven en el santuario francés durante cinco jornadas.
Con el lema “Lourdes, una puerta de la fe”, los peregrinos participarán en la misa internacional que se celebra en el santuario, en la procesión de las antorchas al anochecer y en otras celebraciones sacramentales, y recibirán en este Año de fe el Credo de la Iglesia en la capilla de San José. Además de las liturgias, la peregrinación a Lourdes vivirá intensos momentos de convivencia en un clima festivo y familiar.
Precisamente a Lourdes y a este peregrinaje dedica el Arzobispo de Oviedo monseñor Jesús Sanz su carta de la semana. Para el Arzobispo “este bendito lugar mariano ha sido testigo de tantas llamadas a la fe” que el milagro actual de Lourdes no reside tanto en la curación de una enfermedad del cuerpo, “sino de una enfermedad del alma”.